viernes, 23 de octubre de 2015

Absurdos de la carretera

Manejando por el camino la pólvora rumbo al trabajo, de repente me topo con un pony! En la pista de al lado, un camión a la misma velocidad del pony. El chofer fumando y riéndose. Así estuvimos por 3 kilómetros, yo compartiendo en parte la risa del chofer (nada arruina la felicidad de un viernes), esperando a ver cuánto tiempo se iban a tardar en comenzar a sonar las bocinas de los autos que se acumulaban detrás mío.


Cosas surrealistas de algunas mañanas que te hacen llegar tarde al trabajo. Por suerte no tengo horario fijo 
: